El poblado neolítico y celtíbero de la Hoya esta ubicado a unos seiscientos metros de la villa de Laguardia, en dirección norte, se encuentra este importante yacimiento, ocupado por primera vez allá por el siglo XV antes de Cristo. La importancia del asentamiento la prueba una importante defensa que rodea esta población, que tiene una extensión de unas cuatro hectáreas y que llegó a ser un destacado centro comercial y de organización del territorio. En sus alrededores, prueba asimismo de la importante presencia humana desde el principio de los tiempos, se encuentran concentrados distintos monumentos funerarios megalíticos, como son el dolmen de San Martín, La Chabola de la Hechicera o el dolmen del Sotillo.
Paso a través del tiempo del poblado Neolítico de la Hoya
El poblado Neolítico y de la Edad del Hierro de La Hoya fue descubierto en 1935 por un vecino de la vecina ciudad de Laguardia, y las primeras excavaciones se realizaron ya en 1950 no siendo continuadas hasta a los años 70. En la actualidad un pequeño, pero interesante museo instalado en el yacimiento permite al viajero descubrir la historia de este importante asentamiento. Los restos materiales encontrados en la excavación de los niveles más antiguos indican que hubo un primer asentamiento hacia el siglo XV antes de Cristo, que tuvieron contacto, a juzgar por diversos hallazgos, con las culturas megalíticas del Vaso Campaniforme. Estos nuevos pobladores se establecieron sobre un pequeño monte desde el que dominaban los alrededores ante posibles incursiones de sus enemigos. Eran gentes del tipo indoeuropeo, que penetraron en la península Ibérica desde las regiones frías de centroeuropa, por los diversos pasos de los Pirineos. En esta época tan temprana los pobladores ya se tuvieron que buscar su defensa y extendieron un cinturón amurallado primero con una simple empalizada de madera y más adelante con otro de una mampostería algo burda, pero indudablemente más eficaz. Dos siglos después, en el XIII a. de C, llegaron nuevas gentes centroeuropeas que cambiaron ciertos aspectos constructivos del poblado. Esta segunda fase de ocupación se caracteriza por un mayor uso de la piedra, tanto en los niveles inferiores de las casas como en la muralla que constituía su defensa de los ataques de clanes rivales.
Construcciones en el poblado neolítico de la Hoya
En cualquier caso, la mayor parte de los restos visibles hoy se refieren a un poblamiento celtíbero del siglo IV antes de Cristo. Se ha descubierto un área rectangular de la población en cuyo centro hay un curioso bloque de viviendas, con forma de proa, alrededor de dos patios centrales y que están bordeados por calles en sus tres lados. Muy posiblemente se encuentren más casas bajo las zonas que aún no están excavadas, ya que se adivinan junto a las construcciones los cimientos de otras viviendas vecinas. La estrecha entrada a la rudimentaria y primitiva fortaleza está dispuesta frente al vértice del bloque triangular de casas y la muralla de piedra parte hacia cada lado. Tanto por el tamaño de las piedras que utilizaban como por la dimensión de las viviendas, las casas de los celtíberos eran significativamente más grandes y robustas que las de sus antecesores. Sin embargo, se han recuperado gran cantidad de restos cerámicos de las ocupaciones del neolítico y de la Edad del Hierro, que junto a las herramientas y armas celtíberas, proporcionan una idea aproximada de las diferentes culturas que aquí residieron.
Museos de los objetos descubiertos
En el pequeño museo adjunto al yacimiento se pueden admirar algunos de los objetos encontrados en él. Diversas piezas cerámicas de todas las épocas aquí representadas, armas celtíberas, ornamentos de bronce y broches del último periodo, objetos de culto, piezas de cuerno talladas utilizadas como silbatos para comunicarse, e incluso una curiosa serie de pesas que indican la importancia de este asentamiento como centro comercial. Sin embargo, no todos los hallazgos se encuentran en este museo, ya que una parte importante de éstos están expuestos en el Museo Provincial de Álava.